Estrategia es una compañía de consultoría enfocada en planeamiento estratégico. Hoy tengo el placer de presentarles el sexto vídeo sobre planeamiento estratégico. Este en concreto trata sobre la ventaja competitiva sostenible en el tiempo.
Disfrútenlo. La ventaja competitiva sostenible en el tiempo es lo que permite a una organización diferenciarse. Si no se encuentra con una ventaja diferencial, el precio se convierte en protagonista.
En cambio, si la organización es capaz de ofrecer algo relevante y diferente, se le da la excusa perfecta al cliente para hacer un esfuerzo por conseguirlo. Las compañías deben tener una ventaja competitiva sostenible en el tiempo clara. Debe haber algo que las diferencie del resto.
Debe contar con algo que le dé la excusa perfecta al consumidor de pagar más. Es que los clientes siempre deben sentirse ganadores, incluso cuando pagan más. La ventaja competitiva sostenible en el tiempo es el valor que una empresa consigue crear para sus clientes. Por ejemplo, si la empresa invierte significativamente más que sus competidores en investigación y desarrollo, es probable que constantemente pueda estar dándole novedades al mercado en forma de productos nuevos. En ese caso, dicha empresa se diferenciará del resto por la innovación.
Al ser la primera en lanzar determinado tipo de producto, puede permitirse cobrar un precio más alto que la competencia. La ventaja competitiva sostenible en el tiempo también puede estar relacionada con precios bajos. Walmart se diferencia del resto por el precio. Su eslogan, ahorra dinero, vive mejor, hace alusión claramente a los precios bajos.
Esa es su forma de diferenciarse. Para que esto suceda, es importante contar con una estrategia que construya una ventaja competitiva sostenible en el tiempo que permita dicha diferenciación. La estrategia en ese caso está relacionada con las eficiencias y la excelencia operativa, la tecnología, las economías de escala.
la innovación en su sistema logístico, las alianzas con proveedores o socios estratégicos son sólo algunos ejemplos de cómo su estrategia está diseñada para construir su ventaja competitiva sostenible en el tiempo y de esa forma diferenciarse y poder ofrecer los precios más bajos del mercado. Las empresas pueden o no contar con una ventaja competitiva sostenible en el tiempo que les permita diferenciarse. Lo importante, si no se cuenta con una ventaja diferencial, es tener claro cuál debería ser y a por qué.
a partir de ahí desarrollar una estrategia que construya la ventaja competitiva sostenible en el tiempo para de esa forma generar la ventaja diferencial. Si ya se cuenta con dicha ventaja diferencial se deben desarrollar estrategias que mantengan la ventaja competitiva sostenible en el tiempo y estrategias que capitalicen la ventaja diferencial. En cuanto a la ventaja diferencial, debe ser sólida, relevante para el público objetivo de la empresa y, sobre todo, debe ser verdad.
No se deben prometer cosas que no se puedan cumplir o el efecto será incluso peor que no contar con algo que diferencia a la compañía del resto. En definitiva, la ventaja competitiva sostenible en el tiempo le permite a las organizaciones diferenciarse. Para que esto suceda, durante el proceso de formulación estratégica de la empresa, se deben desarrollar estrategias que construyan dicha ventaja. ventaja competitiva sostenible en el tiempo si no se tiene o que la capitalice si ya se cuenta con ella.
Lo que no debe suceder nunca es que la organización no tenga o no esté construyendo aquello que la deba diferenciar del resto. Dejo entonces algunas preguntas abiertas para aquellos que se animen a detenerse un momento a pensar en ellas. ¿Cuenta su empresa con algo que claramente la diferencia del resto? Si es así, ¿cuál es la ventaja competitiva sostenible en el tiempo que le permite a su empresa diferenciarse del resto? Si no es así, ¿piensa hacer algo al respecto?