Bully Magnets presenta Y ahora es tiempo de una historia animada del libro Historia Mundial de Nuestros Grandes Errores Suscríbete a Bully Magnets, nos ayuda mucho a mantener este proyecto con vida Apoya los contenidos educativos por internet Gracias El evento del que hablaremos hoy es por todos conocido Una pregunta de cajón en la parte de historia de todos los exámenes de admisión A ver niños, ¿Cuál fue el evento que detonó la primera guerra mundial? El asesinato del archiduque Francisco Fernando y su esposa en Sarajevo el 28 de junio de 1914. Un evento del que sin embargo pocas veces se habla más allá. Pero ¿quién fue este archiduque Francisco Fernando y por qué fue tan importante que lo mataran?
No importa, fue un bigotón con un sombrero chistoso al que mataron en un carro y eso comenzó la primera guerra mundial. Bueno. Ya es hora de su recreo, váyanse a comer una marucha, yo me voy a echar una siesta.
Así que el día de hoy intentaremos ir más allá del hecho y explicar, bueno, quién fue Franz Ferdinand. El archiduque Franz Ferdinand, mejor conocido en español como Francisco Fernando, era el heredero del imperio austrohúngaro, y aunque este es un título muy impresionante, lo cierto es que Franz vivía a la sombra de su abuelo, el emperador Franz Josef I. quien a pesar de ser ya un hombre mayor, gobernó el imperio hasta 1916, una especie de Porfirio Díaz austrohúngaro. Pero Franz pasó gran parte de su vida muy atrás en la lista de herederos al trono. El heredero era el único hijo varón de Franz Josef, llamado Rudolf, al que Franz Josef se encargó de destruir psicológicamente.
asignándole un tutor sádico y que nadie quisiera tener como maestro llamado el mayor general conde Leopold Gundercourt. ¡GUNDERCOURT! A quien Franz Josef prácticamente le dio permiso de torturar de cualquier manera que quisiera a Rudolf para hacerlo todo un hombre bajo los estándares del siglo XIX, digno de suceder a Franz Josef.
De esta manera, Leopold Gundercourt hacía ejercitarse a Rudolf por horas en el frío invierno austriaco y lo solía despertar a punta de balazos a mitad de la noche. ¡Ah! ¿Por qué hace eso?
¿En qué me va a ayudar eso a ser un mejor emperador? ¡Cállate ya! ¡Quiero 500 lagartijas ahora!
A pesar de todo esto, Franz Josef se negó a despedir a Gundercourt afirmando que Rudolf era un eslabón débil. No es digno de heredar mi trono. No es más que un muchacho endeble que no ha hecho nada con su vida ¿Qué no?
¿Usted mismo era un muchachito endeble a los 18 años cuando heredó el trono? Sí, pero no es lo mismo, yo era cool y así No fue sino hasta que su esposa, la emperatriz Sisi amenazó con irse del palacio que Franz Joseph decidió relajar las medidas tutoriales Pero para entonces ya era muy tarde Y Rudolph, siendo un muchacho sensible, nunca se recuperó del todo, y en los años siguientes sufriría de melancolía y depresión, hasta que se suicidó en 1889. Este suceso puso en la línea de sucesión al primo de Rudolph, Franz Ferdinand, después de que su padre, el hermano de Franz Josef, Carl Ludwig, abdicara casi de forma inmediata. Lo iránico del asunto es que para ser el hombre cuya muerte provocó la primera guerra mundial, Lo cierto es que en vida, bueno, nadie tenía cosas precisamente buenas que decir de Franz.
De temperamento volátil, terco y un rico mimado que estaba acostumbrado a obtener lo que él quisiera y solía quejarse por días sin cesar cuando no lo conseguía, Franz no era un hombre con muchos amigos. Se unió a la academia militar y obtuvo el rango de general desde muy joven, en sus veintes. Su temperamento y en general su...
Cara, no hacían más que provocar una decepción infinita en el emperador Franz Joseph. ¡Debiluchos, debiluchos todos! Y cuando digo que nadie tenía cosas buenas que decir de Franz, en particular me refiero al reino animal.
Y es que cuando se trataba de cacería, quizá pocas personas en la historia cazaron tanto como lo hizo Franz Ferdinand. Se calcula que mató a algo así como 25 mil animales durante su vida. Ese Franz Ferdinand es un psicópata. ¡La diabos! Su hobby, sin embargo, no era bien visto por su tío Franz Josef, así como muchas otras cosas, como sus posturas políticas.
Digamos que Franz Josef y Franz Ferdinand no se llevaban nada bien en general, pero ni modo, era el único en la línea de su... y Franz Josef tenía que aguantarse. Mientras esperaba su lugar en el trono, Franz Ferdinand tenía que cumplir con muchas funciones protocolarias, como ir a bailes, hacer visitas diplomáticas o recorrer los confines del imperio. Aquel era un trabajo fácil y le permitía al archiduque pasar tiempo con su esposa, la condesa Sofía María Josefina, que por ser una condesa checa de menor rango, no era bienvenida entre los miembros de la corte. ¡Les ordeno que la ignoren!
Ignoren a la esposa de mi decepción de sucesor Francisco Fernando. Soy el emperador y puedo ordenar este tipo de cosas. Ignórenla. Nadie la pele. Ya.
Ash. Franz Josef usó este matrimonio no aceptado como excusa para negarse a aceptarlo como su sucesor, así como también el hecho de que Franz Ferdinand tenía tuberculosis. Es débil y se puede morir en cualquier momento.
Así que en cierto punto de su vida, en los inicios de 1900, Francisco Fernando y su esposa decidieron abandonar Viena con sus hijos abruptamente e irse a su casa de retiro en Konopisch, en lo que hoy se conoce como República Checa. Así que bien por ellos, mal por todo el reino animal que se vio mermado significativamente ahora que el archiduque tenía más tiempo libre para cazar. Algún día, algún día aprenderé a operar este aparato y entonces, entonces tendremos ¡VENGANZA! ¡VENGANZA! ¡Ahhh!
¡Te maldigo Francisco Fernando! En 1914, Franz tuvo la misión de hacer un recorrido por Sarajevo, que en aquel entonces era una ciudad y región afiliada al imperio austrohúngaro, pero en graves problemas. Con bombas y rifles, distintas organizaciones nacionalistas se manifestaban contra el imperio, y desde unos años atrás habían atacado sistemáticamente a los gobernadores y miembros de la nobleza austrohúngara.
La misma esposa de Franz Josef, la emperatriz Sisi o Elizabeth de Austria, había sido asesinada a puñaladas en 1898 por un anarquista italiano en Ginebra. Aún así, por alguna razón, se decidió que el archiduque se paseara por ahí. El 28 de junio, Franz y su esposa salieron en un auto descapotado.
Su paseo por las calles de Sarajevo consistía en un corto recorrido que les permitiría ser vistos por la población y después dirigirse a un cuartel militar. Pero apenas salieron, fueron atacados por un radical que les arrojó una bomba. El explosivo rebotó en el auto e hizo estallar una de las escoltas.
El archiduque escapó a toda velocidad hasta el cuartel. sin saber que en el camino le habían aventado un segundo explosivo que no funcionó. Franz estaba furioso, ofendido y asustado.
Aquel atentado había sido una afrenta directa a su autoridad y aún así se negó a terminar el tour y escogió desviarse para visitar a los heridos de la primera explosión. Aquella fue una muy mala decisión porque el conductor se equivocó de camino y se perdió en la ciudad y cuando quiso retomar la ruta se le apagó el motor. y quedó varado junto con la pareja imperial. Y por si aquella no fuera suficiente mala suerte, resulta que en el café cercano donde se descompuso el carro, estaba uno de los atacantes, un hombre llamado Gabrilo Princip, que al reconocer a los pasajeros no se la pensó dos veces, se acercó y asesinó a balazos al archiduque y a su esposa. ¡Ah, maldita sea!
¡Se nos adelantaron! Pero bueno, al menos el enemigo de los venados ha muerto. ¡Que arda en el infierno!
¡Que arda! El atentado trajo mala suerte, no solo al archiduque, que debió haber cancelado su paseo después de la primera bomba, sino que su muerte causaría estragos a escala internacional, desencadenando una serie de eventos que propiciaron el inicio de la Primera Guerra Mundial. Y si el hecho de que tu muerte cause la destrucción de... toda Europa no puede ser considerado un síntoma de mal agüero, entonces nada más lo es. Y esa fue a grandes rasgos la historia de Franz Ferdinand, el hombre cuya muerte provocó la primera guerra mundial.
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