Frase emblemática de Susana Jiménez: "¿Usted qué quiere? ¿Un Sheraton?"
El Padre Grassi, condenado por abuso de menores, es una figura controvertida en la televisión argentina.
Fundación Felices los Niños
Creación: Grassi fundó Felices los Niños con la intención de ayudar a niños en situación de vulnerabilidad.
Aportes significativos: Políticos y empresarios, como Carlos Menem, apoyaron la fundación económicamente.
Proyectos: Se construyeron hogares y centros educativos, aunque la gestión de Grassi fue cuestionada.
Acusaciones y abusos
Testimonios: Se revelaron relatos de abuso sexual por parte de Grassi, uno de los cuales fue de un menor conocido como Gabriel.
Desvío de fondos: Acusaciones de que Grassi utilizó donaciones para su beneficio personal y desvió recursos hacia la cárcel.
Condiciones precarias: La fundación enfrentó denuncias por proveer alimentos vencidos a los menores.
Historia personal de Grassi
Trayectoria: Grassi se hizo popular en medios de comunicación, lo que le permitió consolidar su poder.
Relaciones políticas: Estableció contactos con figuras influyentes que le proporcionaron recursos para su fundación.
Escándalo mediático
Concurso telefónico: En 1997, durante un programa de Susana Jiménez, se recaudaron más de 18 millones, pero Grassi denunció haber recibido solo 400,000 pesos.
Donación de Susana: Jiménez donó 680,000 pesos como respuesta al escándalo.
Proceso judicial
Denuncias: A partir de 2002, comenzaron a surgir denuncias formales que llevaron a la detención de Grassi.
Juicio y condena: En 2009, fue condenado a 15 años de prisión por abuso sexual agravado.
Libertad vigilada: Grassi intentó evadir la prisión, comparando sus acciones con las de una víctima de conspiración.
Conclusiones
La historia de Grassi es un reflejo de la corrupción en el manejo de recursos destinados a la caridad.
Ironía: Un sacerdote que buscaba ayudar a niños terminó siendo condenado por los mismos abusos que pretendía prevenir.